Veamos primero lo que necesitamos:
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Tabla de madera de 15cm x 250
cm
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Lija de madera
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2 latas de pintura en spray color blanco mate
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Serrucho o caladora
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Taladro
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Ménsulas invisibles (se pueden conseguir en ferreterías
industriales)
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Taquete de plástico
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Rondanas
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Desarmador
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Nivel con burbuja
La tabla de madera la podemos obtener de una maderería local, a mi
me costó 85 pesos. Ya una vez lista nuestra tabla nos disponemos a marcar
los puntos en donde cortaremos con el serrucho o caladora.
Podemos dividir en 4 partes iguales la tabla o bien en medidas que
nos agraden tomando en cuenta las cosas que pensamos poner en nuestras repisas.
Lo siguiente es lijar la madera cuidadosamente y limpiarla con un
trapo seco; después nos dispondremos a pintar con el spray teniendo cuidado de
no escurrir la pintura en algún punto. Esperar a que seque bien para poder
manipularlas.
En realidad no existe una regla en donde poner nuestras repisas,
yo ubiqué dos cerca de la entrada a la recamara y 2 al otro extremo cerca de la
esquina para libros y recuerdos de mi esposa.
A continuación procedemos a meter el taquete en el agujero,
después procedemos a atornillar la ménsula (poniendo en el extremo a la pared la
arandela o rondana de metal), asegurarnos que quede bien fijo y no se mueva.
Una arandela es un disco delgado con un agujero, por lo común en el centro.
Normalmente se utilizan para soportar una carga de apriete. Entre otros usos
pueden estar el de espaciador, de resorte, dispositivo indicador de precarga y
como dispositivo de seguro. (wikipedia)
Por último procedemos a colocar la tabla sobre las ménsulas,
cuidando que queden equilibradas lo mejor posible. Ahora ya tenemos unas
bonitas repisas que adornan nuestro dormitorio.
Foto: Santos A. |